¿Para qué es buena la gratitud?
Preparé un cuaderno para que, cada día, puedas dedicarte un momento a la gratitud.
¿Por qué es bueno hacerlo?
1. Reconocer las cosas buenas que tienes, impulsa tu salud. La investigación de Emmons y McCullough mostró que la gente agradecida padecía menos episodios de depresión y estrés, menor tensión arterial, más energía y mayor optimismo.
2. Desacelera el envejecimiento. En personas mayores, Emmons y McCullough descubrieron que agradecer diariamente incluso desacelera algunos efectos de la degeneración neuronal, que tiende a ocurrir a medida que envejecemos.
3. Frena el estrés. El cortisol se suele llamar “hormona del estrés” y cuando nuestros cuerpos producen demasiado, puede mermar nuestro sistema inmunológico e incrementar nuestros niveles de azúcar en la sangre.
4. Ser agradecido ayuda a crear vínculos. La investigación de los psicólogos estadounidenses Sara Algoe y Baldwin Way indica que la gratitud también puede llevar a tener mejores relaciones. La explicación puede deberse a un aumento en la producción de la oxitocina, a veces conocida como “la hormona del amor” porque fomenta la calma y la seguridad en las relaciones.
5. Gratitud = ¿buena para el corazón y la línea? Y dado que, según el estudio que Emmons cita en su libro Gratitude Works!, las personas con presión arterial alta que expresan gratitud de forma activa “pueden reducir hasta un 10% tu presión arterial sistólica y disminuir tu absorción de grasas en hasta un 20%.”