Empiezo con esa frase tan conocida que dice que “tu cara sea el reflejo del alma”.

Somos seres emocionales y por tanto, dichas emociones las vivimos cada día, por lo que lo queramos o no las reflejamos en nuestro rostro.

La alegría, tristeza o irá son emociones que con el tiempo dejan marcas en nuestra fisonomía y reflejan parte de nuestra personalidad, pero ¿qué revelan nuestras líneas de expresión?

Básicamente son siete emociones las que se reflejan en el rostro: alegría, sorpresa, temor, angustia, miedo, asco y desprecio.

Las líneas de expresión facial aparecen por las contracciones musculares que hacemos de manera repetitiva; las podemos diferenciar de una arruga porque son más profundas y definidas.

Al dividir el rostro en zonas podríamos decir que la parte superior se relaciona con lo mental, intelectual y procesos lógicos. La media con la emoción, así como con la capacidad de adaptación. En tanto la zona inferior simboliza la voluntad, disciplina y constancia».

Las líneas que se van definiendo en cada parte de la cara son el resultado de nuestra actividad mental que percibimos de forma inconsciente y reflejamos lo positivo o negativo dependiendo de nuestro pasado.

Por eso, podríamos definir cada una de esas líneas de expresión de una forma diferente.

Las vamos a enumerar para ver si resuenan contigo un poquito.

1. La comisura que nace a la altura de los orificios de la nariz y terminan en donde inician los labios es señal de las personas que defienden sus ideas y sabe lo que quieren. Se relaciona con la parte intelectual. Cuando ésta se extiende por debajo de la boca y hasta el mentón significa una personalidad negativa que ha sufrido mucho dolor emocional.  

2. Conocidas como “patas de gallo», estas son las comisuras externas de los ojos que muestran un carácter alegre y romántico cuando están hacia arriba. Cuando se ven hacia abajo reflejan tristeza.

3. Las dos líneas rectas que se forman en el entrecejo o los llamados surcos interciliares, cuando son simétricos advierten una personalidad justa, sincera, meticulosa y con disciplina mental.

4. Cuando se forman pliegues en el entrecejo, justo en donde inicia el borde de la nariz (zona conocida como anillo de león) representa un carácter fuerte, autoritario, así como de irritación e ira.

5. Hendidura del mentón es signo de armonía, amabilidad, sensatez y prudencia. También refleja cierta vanidad y sobrevaloración personal. Es una personalidad de ideas positivas.

6. Las líneas marcadas en las mejillas son una manifestación de estrés, nerviosismo y ansiedad. Cuando únicamente se observa un pliegue vertical es indicador de una personalidad fuerte y de audacia.

7. Cuando se marcan pliegues horizontales en la frente y estos son profundos es señal de un gran poder de concentración e inteligencia.

Con esta información extraida de Internet, sólo te podría decir que honres tus arrugas, tus líneas de expresión, sean las que sean.

Son las tuyas, esa eres tú, son el signo visible de que pasaste por ahí y saliste victoriosa.

Honralas como un trofeo. Acéptalas y mímalas, con todo tu amor.

Dales hidratación, cariño y sí, límpialas. Como limpias tu mente y tu alma.

Pero ellas forman parte de ti. Eres bella, no lo olvides  nunca. 

Y acabo con otra frase «que tu alma sea el reflejo de tu cara».