¿Amas sin miedo?

¿Por qué a veces amar se nos vuelve tan doloroso?

Hay mucha teoría por todos lados, muchos métodos, pasos a seguir, personas de las que alejarse, fórmulas…da igual, parece que todos sabemos cómo amar, pero en realidad, todos hemos sufrido por amor de una forma u otra.

A veces creemos que solo duele cuando no te aman y que los “malos” de la película son esos que no te aman por lo crueles que llegan a ser, lo incapaces de mostrar amor, etc…pero a veces deberíamos conocer la otra versión de la historia.

No estoy justificando el maltrato, estoy diciendo que muchas veces ciertas etiquetas solo hacen daño a quién se las colocamos y que quizás hay tanto dolor en ciertos corazones que se han vuelto incapaces de amar, pero eso no significa que no tengan amor dentro de ellos, solo que no saben, que no pueden y que están cargando con tantas heridas que les asusta amar, sencillamente porque ese amor les puede reflejar todo ese dolor no sanado.

Si en la infancia se vivió la herida del rechazo y esa herida no se ha sanado, una persona con ese dolor, siempre va a dejar al otro antes de que le dejen solo para no volverlo a sentir. Si en la infancia se vivió la herida de la humillación, posiblemente ese corazón vaya con una coraza tan grande que sea imposible de traspasar y por tanto, nunca van a dejar entrar a nadie.

Somos seres heridos, hiriendo a los demás para que nadie nos toque esas heridas y nos recuerde que ahí hay dolor no sanado.

El problema es que es dolor vive en nuestro corazón y en nuestra mente y nuestro inconsciente siempre vive en el presente y cualquier movimiento en falso activa ese dolor y es ahí cuando no lo sabemos gestionar, o lo gestionamos culpando al otro sin asumir ningún grado de responsabilidad.

Así, que quién esté libre de “pecado=dolor” que tire la primera piedra, quizás así, en vez de estar culpando tanto al otro, entrando en conflicto constantemente, podríamos empezar a sanar sin miedo a ser heridos de nuevo.